LO QUE HE APRENDIDO DE LA HISTORIA DE MI PATRIA. Rogelio Madrazo Serra Hace unos días aprendí que la historia de Cuba en el siglo XX, hasta el año 1960 se podía resumir de la siguiente manera: La Mafia era dueña de la Isla, Batista era dueño de lo que la mafia no quería, el gobierno Norte Americano era la única institución que podía salvar a Cuba, aunque desde entonces era en extremo incompetente. También aprendí que los campesinos se alzaron contra Batista cansados de ser pobres, que el pueblo cubano era corrupto, inmoral y poco educado, que en el frenesí de la victoria de los campesinos en el año 1959, en la Habana se saquearon casinos porque el pueblo estaba harto de ser explotado por la Mafia. También me entere que la razón que artistas de fama internacional se presentaban en la Habana era para entretener a los mafiosos. Esta lección sobre mi Patria y mi pueblo tuve el gusto de verla en el History Channel, hace unas pocas noches. En el programa se presentaron tres cubanos, traidores, entre varios historiadores y testigos presénciales del desastre que era Cuba, antes de que los campesinos tomaran el poder, bajo la dirección de un joven idealista que iba a salvarnos de nosotros mismos y de la dominación de la Mafia. Y pensar que nací, me eduque, me case y tuve dos hijos en medio de ese desastre y no me di cuenta que aquello era un chiquero en que no se podía vivir. Pensar que los que han muerto y mueren por la libertad de Cuba lo han hecho por algo que no servia para nada y que el sacrificio de sus vidas es y ha sido una perdida de tiempo. Las memorias de mis antepasados, lo que me enseñaron y los ejemplos que me dieron todo mentira, los principios morales que me amamantaron en la religión, mis amigos, mis escuelas, la ética de trabajo, que me enseñaron aquellos peloteros de la Liga Industrial, que dejaban el campo de juego cuando su numero era llamado para ser estibadores en la Bahía de la Habana, aquellos profesores que tuve el privilegio de conocer, cubanos dignos y preparados que se esmeraban por hacernos mejores, todo mentira. El progreso industrial, la proliferación de centros de enseñanza superior, la creación de profesionales que en la diáspora han demostrado el calibre intelectual, ético y moral de su formación, todo mentira, el obrero que en un clima de libertad se ha hecho empresario o trabajador consciente y cumplidor . La marcha pacifica del millón de ciudadanos en año 1959 donde juntos a nuestra patrona La Virgen de la Caridad, le dijimos al mundo que no éramos comunistas, otra mentira, nos mojamos para defender a la Mafia que era amenazada por los campesinos victoriosos. Ese pueblo que después de 47 años alejado de la tierra nuestra se mantiene militante en las filas de organizaciones como la Asociación de Municipios en el Exilio, que peleo en la Brigada de Asalto 2506, que lucha en la clandestinidad, que ha demostrado una capacidad inigualable de sacrificio y persistencia histórica, somos todos los beneficiarios de la corrupción que la Mafia y el Sargento nos brindaron. Nosotros los que elegimos el exilio, somos seres extraños que buscamos una vida mejor, los que decidieron tomar el mismo camino en Europa durante la guerra fría eran buscadores de libertad, los que hicieron túneles bajo el odioso muro de Berlín para rescatar a familiares y amigos fueron héroes de los que aun hoy se habla, mis compatriotas que se montan en una lancha rápida o lenta para sacar a sus amigos y familiares son contrabandistas. En fin, Cuba y los cubanos somos la gran mentira, Batista, Luciano, Lasky, Trafficante, Siegle son los verdaderos arquitectos de la Nación y colectivamente estábamos dormidos mientras que Cuba era explotada, dormidos no, probablemente endrogados con la droga que se derramaba de los sacos cuando era transferida de un barco a otro en el puerto de la Habana por y para el beneficio de los nuevos próceres que el History Channel me han brindado. Cuba debe de ser LIBRE
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