«SIN EMBARGO, CON EMBARGO ALGO SE PODRA LOGRAR»


El mayor impacto que ha tenido el embargo impuesto por los Estados Unidos al régimen Castrista hace mas de 35 anos, ha sido el de producir desanimo entre aquellos que alguna vez albergáramos las esperanzas de que sanciones económicas debilitarían al Tirano y eventualmente propiciarían su caída.

Tal vez el embargo pudiera haber producido el resultado para el cual se promulgo, pero solo hubiera sido efectivo muy al comienzo del Castrismo. En aquel momento, la economía cubana estaba orientada casi exclusivamente a la de los Estados Unidos, con un grado de integración que bien puede haber sido superior a la de Puerto Rico y casi al mismo nivel que el de los 50 Estados que forman parte de la Unión. Resulta evidente que con ese grado de dependencia económica difícilmente pudiéramos haber sido independientes desde el punto de vista político, por lo que nuestras ansias de plena Soberanía nunca quedaron satisfechas en su totalidad.

Como resultado de esa gran dependencia económica y comercial, prácticamente la totalidad de la planta y del equipo productivo, de transportes, etc. existente en Cuba en 1959 era de fabricación Norteamericana y, por lo tanto, Cuba dependía de los Estados Unidos para repuestos, modernización y aun reposición, esto ultimo dado los lazos comerciales establecidos. Pero Castro muy pronto entrego el país a los Soviéticos, precisamente a cambio de maquinaria y equipo ( que a los Soviéticos les resultaba difícil de colocar, debido a lo arcaico de su tecnología y pobreza de diseño) así como protección militar y "ayuda" económica, esta ultima para un País que jamas en su historia se había visto necesitado de contraer un préstamo publico de mediano o largo alcance en el exterior. La planta industrial y agrícola de Cuba quedo transformada casi instantáneamente y su dependencia en Estados Unidos ceso. Los pocos repuestos para planta y equipo de fabricación Norteamericana que aun se encontraban en servicio se obtenían con facilidad de Canadá y se intento adquirir equipos nuevos en Argentina de filiales de empresas Norteamericanas. Así, el embargo quedo desprovisto de dientes prácticamente desde el momento mismo de su promulgación.

Nunca fue un instrumento efectivo como lo fue el embargo impuesto a Sud Africa, una nación con abundantes recursos, simplemente porque el embargo a Cuba fue impuesto unilateralmente por Estados Unidos y sin contar con el respaldo de las Naciones Unidas, como en el caso de Africa del Sur. Por lo tanto, el de Cuba mas que embargo es una prohibición a los Ciudadanos Americanos, exclusivamente, a comerciar con Cuba.

Esta situación es precisamente la que intenta corregir la denominada Ley Helms Burton. Las sanciones que la Ley establece están encaminadas principalmente a afectar a aquellos que apoyan a Castro con sus operaciones comerciales y mediante las inversiones que efectúan en Cuba, sea cual fuere su nacionalidad. Los intereses de dichos empresarios en Estados Unidos pudieran verse afectados si se comprueba que están comerciando con propiedades ilegítimamente expropiadas por el Gobierno Cubano a individuos o empresas Norteamericanas. Lamentablemente, la Ley también contiene una disposición facultando al Presidente de los Estados Unidos a suspender la aplicación de sus preceptos por tiempo fijo. Y esto es precisamente lo que el actual Presidente de los Estados Unidos viene haciendo desde que la Ley fue promulgada. Cifrar las esperanzas en que un futuro Presidente de este país aplique la Ley sin mayor dilación no es absurdo. Pero no debemos considerar que esto es probable. Ello se debe a que la facultad que el Congreso de Estados Unidos le ha otorgado al Presidente de permitir que la Ley entre en vigor en su totalidad, resulta un hueso muy duro de roer, aun cuando los Presidentes de este País no fuesen los pusilánimes, ineptos y sujetos a toda suerte de presiones, tal como han sido la casi totalidad de los que hemos conocido en los últimos 40 anos. La razón de ello es que, al aplicar la Ley Helms Burton Estados Unidos se estaría enfrentando a centros de poder económico de los demás países industrializados. Y estos, sin lugar a dudas, pondrían fuertes presiones sobre sus propios gobernantes, a fin de obligar a los Estados Unidos a ceder. Por lo indicado, pudiera argumentarse que mantener el embargo no es algo que resulte muy fácil de sustentar.

Sabemos que los argumentos esgrimidos por quienes quisieran abrogarlo son totalmente inválidos, pues las necesidades que sufre el pueblo de Cuba no son el resultado de un mecanismo que nunca ha funcionado, sino de un tipo de desmanejo económico que en Cuba, así como en los demás piases que lo han sufrido, siempre ha ocasionado miseria para las multitudes y ventajas solo para aquellos que integran la Nueva Clase y ocupan las posiciones de privilegio. Entre los argumentos en contra del embargo que parecen haber adquirido mayor importancia últimamente son:

Primero, si el embargo no produce resultados y solo sirve como un medio de propaganda Castrista en contra de Estados Unidos, por que no suprimirlo? Segundo, el Papa evidentemente no apoya a Castro y, sin embargo, se opone al embargo. Tercero, no seria mejor entrar en un "constructive engagement" con Cuba?

Si no fuera por ningún otro motivo (como, por ejemplo, mantener viva la posibilidad de que un futuro Presidente Norteamericano decida aplicar las sanciones Helms Burton), el primer argumento es fácilmente rebatible, con solo tener presente que a un enemigo nunca debe dársele nada, sino a cambio de una concesión de su parte. Además, si se suprime el embargo, que puede esperarse que haría el Régimen Cubano? En estos días Castro nos dio un nuevo argumento en favor de mantenimiento, al rebasar los limites de lo absurdo y exigir reparaciones por las muertes que él dice han ocasionado los Estados Unidos. Si se levanta el embargo, quien sabe que reparaciones pudiera pedir, pero ahora con cierto sustento, pues bien pudiera argumentar que Estados Unidos abrogo el embargo por considerarlo una medida equivocada. Además, alguien cree que dejaría de atacar a Estados Unidos por toda suerte de males reales e imaginarios? Solo cuando el Papa habla Ex-Catedra es que es infalible; El resto del tiempo, cuando no se esta expresando en materia de Doctrina, puede estar tan equivocado como cualquiera de nosotros. No me cabe la menor duda que en este caso el Papa ha sido mal asesorado y esta convencido de que la miseria que hoy existe en Cuba es producto del embargo. Pero esto no quiere decir que esta en lo cierto. Él ultimo argumento es del tipo "fuzzy thinking", termino que se invento en Estados Unidos por la dificultad que tienen sus habitantes para pronunciar la frase "pajaritos en la azotea" y no amerita mayores comentarios. Lo que sí puede hacerse es solicitarle a quienes lo propugnan que detallen la relación de causalidad que ellos ven, por ejemplo, entre un juego de "baseball" y la opresión política y el hambre de que padecen los Cubanos hoy en día.

Para nosotros, el embargo no requiere discusión. La aprobación de una ley cuando no existe la intención de aplicarla, no resuelve nada y en un caso como este, solo expone en el campo de la propaganda al país que la aprobó. La enmienda Helms Burton le da a la Ley toda la fuerza que resulta necesaria. Pero como quiera que otorga amplios poderes al Ejecutivo ( en función de que es este quien esta llamado a llevar a la practica la política del País en materia externa) nada resuelve, salvo que el Presidente llegue a considerar la situación de Cuba una esfera prioritaria de acción. (Según un amigo que parece estar bien informado, en estos momentos el asunto de Cuba debe tener una prioridad numero 17 para los Estados Unidos, lo cual considero optimista.

A nosotros que nos queda? Seguir la misma vía que la enmienda Helms Burton, creo yo. Enfocar sobre aquellos que más se benefician hoy en día de la miseria Cubana, es decir, los extranjeros que invierten en Cuba. Será tan difícil levantar un listado de todas las empresas que tienen inversiones en Cuba y comunicarse con sus directivos y, si fuera posible, con sus accionistas? El mensaje seria sencillo: existe un grupo de cubanos que los considera a ustedes colaboradores con el enemigo. Algún día cambiara el régimen en Cuba. Algunos de este grupo podrán formar parte de un Gobierno futuro. Dentro o fuera del Gobierno todos los integrantes de este grupo se dedicarían a asegurar que todos los colaboradores paguen su infamia, precisamente con sus inversiones en Cuba. Sin compensación. Además, perderían el derecho de invertir en Cuba y de comerciar con ella. Para siempre. Que perderíamos, salvo por tener que regresar a nuestra dependencia de antaño con Estados Unidos?


FIN



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