Estados Unidos y el Estado de Sitio

Por José Sánchez-Boudy


Causa pavor ver la indiferencia con que se ha tomado en América Hispana, en Estados Unidos, en Europa, en el mundo entero, el anuncio de Chávez de que se implantará el comunismo en Venezuela. Causa pavor ver cómo en vez de unirse en ideales patrios hay facciones y partidos en Estados Unidos que sólo les interesa el poder y no ayudar a ganar la batalla del Medio Oriente. Porque, óiganlo bien, si no se gana en Irak veremos una nueva cruzada de salvación de todo el Mundo Occidental para poder parar el ataque fundamentalista sobre el orbe cristiano.

Entre los problemas interiores de Estados Unidos y el ataque exterior del comunismo y del fundamentalismo la nación se debate en un estado de sitio. Y esto no es pesimismo. Esto es la historia que está clara y que cualquiera puede leer para darse cuenta de que no solamente se ha situado a los Estados Unidos sino al Mundo Occidental por el fundamentalismo, por el comunismo, por el odio socialista, por la envidia. En fin, quieren destruirnos.

Da pavor que uno hable y hale del Foto de Sao Paulo, el organismo cristiano-comunista creado por Castro y Lula, que se reunió en La Habana y donde Lula se deshizo en elogios hacia Fidel Castro, y se asentaron los planes para comunizar al Mundo Occidental. Para lo que hay que liquidar primero, según el foro, es a los Estados Unidos. Y ahora este mismo foro esgrimiendo al aire las fotografías de Fidel, de Chávez, de Lula, de Evo Morales, de todos los que ustedes queridos compatriotas conocen, están en la avanzada roja que en movimiento quiere tragarse al mundo aliada al fundamentalismo. Da pavor que pocos escuchen. Dos editoriales de nuestro director sobre el Foro son antológicos.

Se acaban de reunir en el Salvador y ya está gritando el foro de Sao Paulo el triunfo del comunismo en el mundo entero; los anfitriones son los comunistas que trataron de aniquilar la democracia en el Salvador. Ya cantan victoria. Un cubano de la calle, de esos que no se dejan engañar porque tienen los oídos en la tierra, en el subsuelo de que hablaba Martí, me decía: "Pepito, el mal está ganando". "Esto es el anticristo". Hay que ponerse en el duro o nos cortan la cabeza". Y añadan a lo que he dicho antes la visita del presidente de Irán a Venezuela. El Imperio Persa, el espíritu del Imperio que pensamos destruido por Alejandro Magno que quemó a Persiópolis; que los griegos pararon en las Termópilas; la fabulosa escuadra persa que invadió a Grecia; todo antes de Cristo, está en movimiento. Irán, confabulado con Chávez y con Corea del Norte y con los enemigos de la libertad, piensa en el Imperio Mundial. Ahora se dan cuenta muchos de que los imperios como el de Estados Unidos; el más poderoso que han conocido los siglos; no puede dejar que nadie lo ofenda y menos permitir la sangre y el crimen a noventa millas de sus costas y el ataque constante por el comunismo a su civilización: a la civilización norteamericana que es el ejemplo más fecundo de la democracia.

Cuando Aníbal el Cartaginés por poco se traga a Roma, Escipión el africano gritó en el Senado, día a día: "Hay que acabar con Cartago". Hoy en día Cartago es un amasijo de polvo y piedra porque la ciudad fue destruida por los romanos; demolida piedra a piedra, envuelta en sal para que no volviera a ella la vida. Los romanos sabían que no se puede dialogar con la sangre y el crimen sino que hay que extirparlo de raíz. Y con este ambiente que tenemos hoy en día en el mundo, con una Europa indiferente a lo que en él sucede, buscando sólo el placer y la buena vida, lo que está muy bien cuando ambos son dominados por la razón y la moral, pensando sólo en como enriquecerse, como señaló aquel extraordinario sociólogo alemán Sombart en sus libros maravillosos, en este momento en que. Como dijo el cubano, de pueblo está aquí el anticristo, o sea el mal, el comunismo, el fundamentalismo, hay quien habla de dialogar con Cuba.

Es que Dios ciega a los que quieren perder. Apréndalo bien, dialogueros. Hay un historiador británico extraordinario, Toynbee, cuyo talento enorme yo reconozco, pero con el que no simpatizo nada porque dio en Puerto Rico en 1961 unas conferencias en apoyo de Fidel Castro, ha escrito profundísimos libros de historia y en sus ensayos de los más interesantes, nos muestra los Imperios que se crearon en el Mediano Oriente desde Nínive a Irán o Persia, y nos muestra su talento para la guerra; nos muestra que esa región del mundo donde nació la civilización tiene la capacidad para tragarse al Occidente si se le deja armarse con bombas atómicas; si se le deja las manos libres para que un día no disparen un cohetazo atómico desde allá, desde Irán. Y esto no es fantasía.. Orwel, en su gran novela "1984" pinta la guerra de los mundos; y hoy en día la técnica todo lo hace posible.

El Orbe Occidental tiene que pararse firma. Los Estados Unidos tienen que prestar la ayuda que sea necesaria para terminar con la monstruosidad cubana. Por su propio bien. Tienen que aceptar que lo que han gritado los cubanos día a día es cierto, y deben saber que el haber permitido, con Francia, el destronamiento del Sha para evitar que el amigo de este país tuviera una gran fuerza militar, que el tratarlo como se hizo una vez que se trajo el fundamentalismo a su tierra, esa cochinada indigna del Mundo Occidental, ha creado el Imperio Persa de hoy con colmillos atómicos que no sólo quiere destruir a Israel sino al Mundo Occidental.



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