Un pequeño pero sincero tributo a los combatientes de Bahía de Cochinos.El 17 de Abril es el 39 Aniversario de la Invasión de Bahía de Cochinos. Es importante que recordemos ésta operación militar porque de haber tenido éxito, la primera dictadura comunista en el Hemisferio Occidental hubiese sido liquidada y no hubieramos tenido tantos problemas en la América Central y hoy Cuba sería una nación libre e independiente y pro-Occidente. Y tampoco hubieramos tenido la crisis de los misíles en Octubre de 1962. Aun hoy, no estuviesemos presenciando y pasando por la historia de Elían Gonzales y de aquellos que murieron cruzando el Estrecho de la Florida. Todos estarían vivos, incluyendo la madre de Elían. El ejército de los Estados Unidos no tenía igual en la técnicas de desembarcos amfíbios en costas hostíles. Decenas de miles de Americanos en desembarcos brillantemente planeados y ejecutados en las Playas de Omaha y Utah en Normandía, Anzio en Italia, Iwo Jima, Saipán, Inchón en Corea y otros mas aseguraron la victoria para nuestras fuerzas militares. Esta pericia equivalía a una garantía de veloz y pronto éxito en las costas de Cuba. La pregunta que los Americanos deben hacerse a sí mismos es, ¿Porque fracasó la Invasión? La contienda que condujo a el fracaso no fue librada en Playa Girón, como los Cubanos llaman la Bahía de Cochinos, sino en Washington, D.C. La acción militar en la costa cubana fue condenada por decisiones de Washington antes de que las primeras tropas de asalto habían desembarcado. Aunque el destino de Cuba estába en juego, ningún cubano participó en las desiciones críticas que se tomaron. El aspecto trágico de la operación, según se desarrollaron los acontecimientos, fué que los miembros de La Brigada 2506 tenían una fe ciega en el gobierno de los Estados Unidos. Ellos estában muy seguros de que sus amigos Americanos nunca los dejarían solos. Los instructores Americanos estában asombrados de el fervor y entusiamo manifestado en el programa de entrenamiento. La certeza de que ellos estában trabajando con representantes de la nación mas grande y poderosa de el mundo siempre estába presente en la mente de los voluntarios. Ninguno concibió nunca la posibilidad de derrota. Pero entonces, ¡desastre! Ataques aereos fueron cancelados y llamados de regreso a sus bases. La Brigada fué abandonada en la playa, todas la peticiones de ayuda negadas. Marineros en el porta-aviones USS Saratoga lloraban porque no se les era permitido ayudar a sus amigos Cubanos. Durante meses antes no hubo duda sobre la complicidad de los Estados Unidos, pero ahora era una complicidad en traición y fracaso. La ¨opinión mundial¨ por la cual los liberales de Washington estában tan ansiosos de sacrificar el honor nacional se volvía ahora agudamente contra los Estados Unidos. Para aquellos Americanos quienes se daban cuenta de lo que había sucedido y porqué, el dolor fue combinado por humillación y verguenza. El heroísmo de la Brigada Cubana 2506 fué recompenzado con traición, derrota, muerte para muchos, y prisión cruel y larga para el resto. Siempre recordaré las palabras y promesa de el ex-presidente Kennedy de devolver la Bandera de la Brigada a los brigadistas en una Habana Libre. Palabras y promesas que nunca fueron cumplidas y hasta el día de hoy, no se le permite a los cubanos emprender ningún intento de liberar su patria. Algún dia la Historia reconocerá verdaderamente la traición contra la Brigada 2506 y reconocerá a los Brigadistas como los héroes que son, que fueron a liberar su patria sin ningún interés personal. Yo comprendo hasta cierto punto la frustración de esos hombres de la Brigada 2506. Mas tarde, después de venir a los Estados Unidos, durante la guerra de Vietnam yo me alisté voluntariamente en el Ejército de los Estados Unidos y serví en Vietnam en una unidad de combate. Antes de que mi ¨tour de servicio¨ llegara a su fín, se me ofreció la ciudadanía Americana y asi pues fuí naturalizado mientras estába aun en servicio activo. Nosotros fuímos enviados a Vietnam del Sur de la misma manera que La Brigada 2506 fué envíada a las costas de Cuba, a una guerra perdida. No habían intenciones de ganar en Cuba y no habían intenciones de ganar en Vietnam. Y así, al igual que en Vietnam, una oportunidad de avanzar la causa de la libertad fue desperdiciada. Jorge Maspóns Abril 10, de 2000 New Orleans, LA
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