Editorial de la O/A.
Hubo un 12 de Agosto y Tambien un 4 de Septiembre...
El 4 de marzo de 1933, Franklin D. Roosevelt tomo posesión de la presidencia
de los Estados Unidos de América. En enero de ese mismo año Adolfo Hitler
devino canciller de Alemania.
El ingeniero cubano Enrique Ruiz Williams, amigo personal de Roosevelt,
ilustró al presidente sobre la crisis cubana la que requería,
segun ellos, una solución que no alterara el status quo, y que se
ajustara a los parametros de la «política del Buen Vecino», Esta
política cambiaba el tradicional intervencionismo de los EE.UU.
en las repúblicas del Caribe, por procedimientos menos irritantes.
Despues de la traición de Tomas Estrada Palma al pueblo de Cuba,
todos los presidentes cubanos gobernaron a tenor de las circunstancias,
para evitar la intervención armada del poderoso vecino.
El 7 de mayo de 1933, Benjamin Sumner Welles,
Sub-secretario de Estado, llegó a La Habana como enviado personal
del Presidente Roosevelt, para negociar un nuevo tratado de reciprocidad,
que, segun el, beneficiaria a ambas partes. Welles en sus primeras
declaraciones no se refirió a la crisis política
cubana. No obstante ello, inició conversaciones con los
representativos de la oposición, y presionó al Presidente
Machado para que restableciera las garantías constitucionales,
diera la libertad a los presos políticos y dictara un Ley de
Amnistía política.
Inicialmente, y a tenor de las instruciones recibidas, Welles
procuraría el consensus de la oposición para que el
Presidente Machado cumpliera el periodo presidencial, que vencía
el 20 de mayo de 1935, se reorganizaran los partidos políticos y
se celebraran elecciones para todos los cargos electivos. Los problemas
económicos tendrían solución mediante el nuevo
tratado de reciprocidad y algun empréstito.
A este proceso se le llamó «La Mediación», una manifestación
de la nueva cara del intervencionismo. El ex-Presidente de la República
el General Mario García Menocal y Deop, la rechazó argumentando
que con ello se legitimaba al gobierno de Machado. El «Directorio Estudiantil
del 30» la rechazó totalmente por ser una intervención de los
EE.UU en los asuntos de Cuba.
Welles, durante la marcha de las negociaciones, optó por desconocer las
instrucciones que había recibido, y decidió conspirar contra Machado. Factor
determinante para este cambio fue la presencia del Dr. Carlos Saladrigas
Zayas, joven abogado y uno de los principales dirigentes del «ABC»,
organización anti-machadista pero vinculada a la banca «americana» por su
fundador Joaquin Martínez Saenz. Esta relación selló el destino de Machado,
fue tan intensa que ni los requerimientos de Cordell Hull a Welles para que
se ajustara a sus instrucciones, pudieron alterar el nuevo curso dado por
Welles a sus gestiones.
Todos los elementos y organizaciones que participaron en la «Mediación»,
pretendian que no se alterara el status quo colonial-semifeudal que la
«Enmienda Platt» habia asegurado en Cuba, desconociendo las legítimas
aspiraciones de los cubanos. Asi que el 12 de agosto del 33, una asonada
militar forzaba la salida del Presidente Machado, breve interinatura del
Gral. Herrera, y al fin la presidencia para el Dr. Carlos Manuel de Céspedes
Quesada, coronel del Ejército Libertador.
La Relación de Céspedes y Welles se remonta a los años 20, cuando este
último vino a Cuba despues de consolidar las bases para Trujillo en
República Dominicana. Durante los intentos «americanos» de forzar la renuncia
del Presidente Alfredo Zayas Alfonso, que habia logrado recuperar la Isla de
Pinos de manos de los EE.UU., Céspedes fue el candidato de Welles para
substituir a Zayas.
Con Céspedes el status quo no se alteró.
Los cubanos siguieron siendo parías en su tierra, el ideario
independentista Martiano seguía encarpetado.
Y se produjo el 4 de Septiembre.
Una asamblea de clases (Sargentos, cabos) y soldados que demandaba mejoras
clasistas fue convertida en un Asamblea Revolucionaria. Este milagro se debe
al apoyo que la dirigencia del «Directorio Estudiantil del 30» prestó a la
asamblea. Carlos Prío Socarrás, Secretario General del Directorio, y Juan
Antonio Rubio Padilla, miembro del mismo por los estudiantes de medicina, les
dijeron a Pedraza, Batista y Mario Alfonso Hernandez, que la asamblea tenia
características de insubordinación, que ellos como miembros del Ejército
podrían ser fusilados, y que a los miembros del «Directorio», como civiles,
poco o nada les sucederia. La asamblea solo tenia una solución, aceptar el
«Manifiesto del Directorio» y constituir una «Junta Revolucionaria». Los tres
aceptaron lo propuesto y Juan Antonio Rubio Padilla leyo a los asambleistas el
manifiesto.
El Tte. Gregorio Querejeta Valdes, presente como oficial supervisor de la
asamblea fue el primero en gritar: «¡Viva Cuba Libre, eso es lo que
necesitamos!» Si hubiese habido alguna duda en los presentes la decision de
Querejeta la elimino.
Al dar lectura al «Manifiesto del Directorio», Juan Antonio Rubio Padilla
cambio el curso de la historia en Cuba.
El 10 de Septiembre de 1933, el Dr.Ramón Grau San Martin asume la
Presidencia de la República, con el Cuba es para los Cubanos, se niega a
jurar la Constitución de 1901 por contener la nefasta «Enmienda Platt». En 130
dias de gobierno promulgó la legislación social-económica y nacionalista que
produjo el milagro cubano, que tanto ha beneficiado a otros pueblos que han
dado acogida a nuestros exiliados.
Desde entonces data el odio de sector feudal de la plutocracia al
Autenticismo. A estas alturas todavia hay quienes defienden a la república
que murió el 4 de Septiembre del 33. No importa que Batista, plattistas y
militares sin honor hayan traicionado a Cuba en complicidad con poderes extranjeros.
No pudieron echar hacia atras el reloj de la historia.
Ahora, despues del desplome del imperio soviético, intereses especiales
propicios a las izquierdas ( Clinton,Carter,Pastor et al) todavia, hoy
mismo, tratan de salvar a Fidel Castro, llegando hasta violar la Ley de Ajuste
Cubano y haciendo todo lo posible con su poder ejecutivo por neutralizar la ley
Helms/Burton. Pero, siempre ha habido alguien que se interpone en las pretensiones
imperiales-socializantes. Por de pronto Clinton se vio obligado a promulgar la Ley
Helms-Burton. Pero otras fuerzas, las armadas, tambien han estado trabajando sobre
la oficialidad superior de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba para
producir otro 12 de Agosto.
Recientemente la Televisión en Miami presento las
imágenes que mostraban las cordiales relaciones existentes entre la
Marina de EE.UU. y los oficiales superiores de las FAR de Cuba en la region
de Guantanamo.
Algunas personas han formado su algarabia. Otros han
demandado explicaciones del Pentágono. Pero ninguno ha ido al
verdadero meollo de la situación.
El senor Jim Hampton, Editor del influyente «The Miami Herald», en 6/30/96.
despues de una suscinta introducción refiriendose a que es «apropiado, y
aún, esencial» que «U.S.,Cuban generals should talk», informa
«El General Sheehan y Gen. Shalikhashvili, jefe del Estado Mayor Conjunto, se detuvo en
Guantanamo en un viaje a Haití en el pasado diciembre. El General Shali no
atendió al encuentro U.S-Cubanos. El General Sheehan habló
a los huespedes».
Con el título de «Building a Record», Hampton continua:«
La política de U.S apunta a mostrar a los oficiales cubanos que el régimen
de Castro, no ELLOS, es el adversario de los Estados Unidos», mi fuente en el Departamento
de Estado dice "The Cuban military is not going to disappear." ..."It's going
to be there after Castro. It might well be the [next Cuban] government." Mas
adelante escribe «Tenemos que construir un record que muestre que mantenemos
nuestra palabra».
Mas claro ni el agua. Los militares, a pesar de Clinton, Carter, Pastor et
al, ya estan haciendo lo suyo para producir un 12 de Agosto. Nosotros estamos
haciendo lo nuestro para otro 4 de Septiembre. El Autenticismo, que ademas
de tener la experiencia de haber cumplido con democracia, a Cuba, no de
palabra sino desde el poder, tambien la tiene con militares con ansias
de liberar a Cuba.
Cuba para los Cubanos. No Soviética,
no Norteamericana. Una Cuba Cubana.
FIN
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Ing. José A Adán y Dr. Miguel Uría
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