«DONDE ESTAMOS»No hay pueblo en América que se nos iguale en la lucha por la soberanía y democracia. Nuestro patriciado hizo pavesas su enorme patrimonio en su esfuerzo de 10 años de guerra- 1868-1878- en busca de la soberanía y democracia. Ese esfuerzo cubano no tiene igual en la historia, porque comenzó liquidando la esclavitud; lo que no hizo ningún libertador en la Américas. Nadie nos puede dar lecciones sobre democracia. Todos nuestros esfuerzos en busca de lo propuesto se inició por cubanos y se llevó a cabo por cubanos. Lo hemos arriesgado todo, incluyendo el bien supremo; la vida. Sin éste los demás carecen de sentido o valor. En 1898, cuándo teníamos al alcance de las manos el triunfo, intervino el coloso del Norte y nos frustró la república "Con todo y para el bien de todos". A pesar de ello no cejamos en lograr esa república. El coloso produjo su 12 de agosto de 1933; pero nosotros ripostamos, un mes después, con la gloriosa revolución de 1933. Desde entonces, no importan las interferencias del coloso, los cubanos hemos demostrado y demostraremos que somos capaces de marchar sin andaderas. Y por saber marchar sin andaderas nos echaron encima el funesto 10 de marzo de 1952 y el 8 de enero de 1959. En la lucha contra la tiranía de Batista, que costó a nuestro pueblo mucha sangre, los Auténticos contribuímos junto al 26 de Julio y al Directorio con irremplazables mártires en todos los frentes de combate, especialmente en el ¨LLano¨, donde se hizo el mayor número de sacrificios. Así ha ocurrido en el combate contra el comunismo, al cual nos hemos enfrentado desde siempre. En este combate hemos sufrido la interferencia nefasta de los supuestos amigos, que ha resultado dañina y provocan justo recelo y desconfianza del pueblo. Es más, llama la atención el curso que está tomando la lucha anticomunista en el exilio y en Cuba, orientado hacia la legitimización del gobierno castrista. Por otra parte la campaña "Pro Derechos Humanos" que se ha orquestado, sobre todo en el extranjero con la complicidad de grupúsculos en la Isla, clama por derechos humanos en busca de migajas del poder y no se condena al marxismo y sus manifestaciones. Se llega hasta reconocer la Constitución Socialista de 1976, y el liderazgo de Fidel Castro como elemento fundamental en cualquier arreglo. Los proponentes del desaguisado, siguen allí como disidentes. La ¨disidencia¨ no se sonroja ante la decisión de Castro, ¡NO ME VOY DEL PODER PORQUE NO ME DA LA GANA!, y la IX Cumbre Iberoamericana, en La Habana, la inauguró con “Llovieron consejos de todas partes pero nosotros pensábamos diferente y estábamos decididos a luchar. Como si tuviésemos por preceptor al mismísimo Aristóteles, escuchábamos educadamente sus consejos con la sonrisa de la Gioconda y la bíblíca paciencia de Job.” Reafirmando que es “imposible que Cuba abandone los caminos de la revolución y socialismo” Estados Unidos, claman por una solución pacífica y sin sangre, mientras otros quieren una intervención armada en la Isla, tipo Haití, que no es otra cosa que un desvergonzado "plattismo" a todo trapo. Nosotros estamos contra toda esa componenda. No queremos que las potencias nos negocien. No queremos que una situación parecida a 1898 nos frustre nuestra nueva República. La democratización de Cuba ES Y TIENE QUE SER obra de los CUBANOS de AQUÍ Y DE ALLÁ. De ahi la gran responsabilidad de Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba (FAR), ya que la problemática cubana no es más que una guerra de Fidel Castro contra el pueblo de Cuba y que Castro NO es la nación cubana. ISLA / EXILIO/ LAS FAR ---es la misma cosa , son las partes INTEGRANTES de esa NACIÓN CUBANA y ese pueblo tiene pleno derecho a luchar por su independencia, soberanía y libertad, sin ataduras foráneas de ningún órden, así como de recibir a plenitud el apoyo legítimo de las naciones democráticas de América. Es derecho legítimo de todo pueblo EJERCER SU DERECHO DE BELIGERANCIA. Los mismos Estados Unidos lograron su independencia con la ayuda decisiva de sus propios hijos; en el extranjero, de los españoles, de los franceses y paradójicamente y, en momentos críticos, de los cubanos. Y todo ello sin entrar a analizar Convenios y Tratados internacionales vigentes al tiempo que los comunistas capturaron la estratégica isla de Cuba. CUBA PARA LOS CUBANOSFIN EDITORES: JOSÉ A. ADÁN Y MIGUEL URÍA17 de Noviembre de 1999 actualizando Febrero 9 de 1996
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