¿Persigue Cuba armas biológicas? Una vindicación al exilio.
Acabo de ver mi nombre entre las fuentes de un artículo que el Senado de los Estados Unidos incluyó como récords en la audiencia (transcripciones no clasificadas) del Sub-comité sobre el Hemisferio Occidental el miércoles 5 de junio del 2002. Que absurdo, sin embargo, me resulta aparecer mencionado en tan alta instancia del senado norteamericano y para que un tema tan delicado como lo es el de la guerra biológica, sea tan extrañamente tratado. Quizás a alguien le daría placer sentirse mencionado allí, pero a mí me da vergüenza. Todo un derroche de politiquería malintencionada. Estoy seguro que la mayoría de mis compatriotas, de leer esas transcripciones, quedarían boquiabiertos. En ellas, el Senador Christopher J. Dodd (presidente del susodicho subcomité) no hace otra cosa que vincular el discurso del Subsecretario John Bolton en la Heritage Foundation a la visita del ex presidente Jimmy Carter a Cuba. Es decir, restar veracidad a las declaraciones del responsable de la seguridad internacional, para darle mérito a la visita que el amigo demócrata hizo al dictador cubano. Y no sólo méritos, sino además agradecimientos y la expresión pública de sentirse orgulloso por ese infructuoso viaje a la isla. No me corresponde a mí calcular el grado de patriotismo del senador Christopher Dodd, ni mucho menos su interés para garantizar la seguridad nacional del país en el que vive, pero al hablar del exilio, me da sin dudas el derecho a la réplica. Él valora el coraje de aquellos cubanos que arriesgando sus vidas deciden escapar de Cuba, pero valora aún más, el de aquellos que bajo las terribles condiciones de la tiranía deciden quedarse en Cuba y combatir al sistema. Es lógico, yo también admiro más el valor de Oscar Elías Biscet que el mío propio. Por tanto, mi más sincero respeto a todos los que optan por esa opción, pero cuidado, que la lectura del mensaje es otra y nosotros también luchamos. Si Cuba es un país dictatorial (como reconoce el demócrata), si Cuba es un país cuyos negocios de tecnología de doble-uso están dirigidos a los estados considerados enemigos de los Estados Unidos (como bien lo sabe el Sr. Dodd), ¿cómo es posible que se examine microscópicamente la frase que conforma una declaración (la del Senador. Bolton) y se tome como válida y concluyente otra en la que sólo se deja ver cierto grado de incertidumbre (la del Dr. José de la Fuente). Lo que uno aprende de toda esta sesión de preguntas dirigidas al Sr. Carl Ford (Asistente del Secretario de Estado para la Inteligencia y la Investigación), es que los demócratas norteamericanos se sirven de la cautela de sus servicios de inteligencia para hacer política. Toda la sesión giró en torno a las declaraciones que el Sr. Bolton hizo el 6 de Mayo del 2002 en la Heritage Fundation y que previamente habían sido pronunciadas por el Sr. Ford el 19 de Marzo del mismo año. En ambas comparecencias, se afirmaba más o menos que los Estados Unidos creían que Cuba realizaba esfuerzos para desarrollar armas biológicas de carácter ofensivo(1). Sin embargo, no parece que el contenido, o la veracidad de esa información sea lo importante, sino el momento en que fueron pronunciadas y que, a juzgar por las palabras del Senador Dodd, dañaban la imagen de Carter (2,3,4) y el mérito de su visita a Cuba. Toda la información clasificada, todos los comentarios del ex director de Biopreparat Dr. Ken Alibek, todas las pruebas de uso de armas biológicas en Angola (5), todas la declaraciones de otros desertores del régimen (incluidas las de altos oficiales militares), e incluso la opinión de la comunidad de la inteligencia norteamericana (INR 6,7,8) fueron desestimadas para dar peso, credibilidad, pero además distorsión a una respuesta del Dr. José de la Fuente (9), quien, sin poder confirmar ni lo uno ni lo otro, se limitó a decir que él no creía que hubieran malas intenciones (10). Y si hablo de distorsión, es porque ustedes pueden comparar las respuestas (11). El Dr. de la Fuente nunca dijo que esas ventas "no tenían" una intención maliciosa, como trata de hacernos ver el Senador Christopher Dodd, sino que "no creía" que tuvieran una intención maliciosa (ver comunicaciones personales a San Martín, in Werlau 2001). Por lo tanto, los argumentos del Sr. Dodd para edificar la defensa a su amigo Jimmy Carter, son evidentemente incorrectos. Esto es a lo que los norteamericanos llaman ser "poco creíbles" cuando se refieren a las alertas del exilio. I hope you were not chastised by me for the last sentences, were you? In any case, I will prefer your self-flagellation, because it was your rule that you broke, not mine. Asumamos que el Dr. de la Fuente es la autoridad científica cubana más capacitada para dar respuesta a muchas incógnitas de la inteligencia norteamericana. ¿Cómo puede un director tan importante en la biotecnología cubana ser ignorado a la hora de tomar decisiones? ¿Es eso lógico? ¿No era el Dr. de la Fuente alguien de confiar? ¿O es que el programa biotecnológico cubano tiene que ver con algunos proyectos no afines al campo de la biomedicina? ¿No es acaso muy sospechoso que un desertor se lamente en el exilio por la venta de equipos de doble uso y no por la posible (ya que el lo deja como posibilidad) utilización terrorista de esa tecnología? Hagamos todo lo posible para creer en la sinceridad de las declaraciones del Dr. de la Fuente. Si en efecto este científico cubano cree que Cuba no tenía malas intenciones en la venta de esa tecnología, ¿por qué duda entonces que Irán no quiera en realidad salvar a todos los niños de Oriente Medio? ¿Es que acaso Cuba e Irán no están juntas en el esfuerzo de "poner a los Estados Unidos de rodillas"? ¿No sería acaso más coherente no creer ni una cosa ni la otra? Es decir, o Cuba e Irán son dos estados reconocidamente humanitarios, o Cuba e Irán son dos estados que promueven el terrorismo y por tanto, la cooperación y venta de tecnología de doble utilización pudiera tener intención armamentista. ¿Por qué un país invierte incalculables sumas de dinero en una Megaindustria Biomédica y luego deja sin role ejecutivo a los que en ella dirigen su trabajo técnico? ¿Por qué un país crea una industria al servicio de la salud y la llena de puertas cerradas de acceso limitado y con una dirección política? Creamos al Dr. de la Fuente, pero no dejemos de preguntarle todas más cosas y sobre todo estas últimas. ¿Por qué él cree que el régimen de Fidel Castro es benigno? ¿Por qué no dice todo lo que sabe y lo hace de dominio público? ¿Por qué un científico de tanta capacidad intelectual toma por tontos a todos en el exilio? Yo no lo sé, pero estoy seguro que algún día lo sabremos. Casi al final de esta sesión del subcomité, el Senador Nelson dijo al Sr. Ford que ese mismo comité había aplaudido el valor de 11 000 cubanos que firmaron el Proyecto Varela, y que aprovechando las credenciales de los testigos allí presentes, él quería saber si la inteligencia norteamericana sabía de alguna represalia que se estuviera gestando contra ellos. La primera parte de la respuesta del Sr. Ford, como muchas de las que ambiguamente contestó a lo largo de esa mañana "no clasificada", es la prueba de su temeraria ingenuidad (12). Un año más tarde, 3 fusilamientos y 75 largas condenas han sido aplicadas contra los disidentes pacíficos cubanos, dejando al ex presidente Jimmy Carter y a los demócratas presentes en el más absoluto ridículo. Carlos Wotzkow Bienne, Mayo 29, 2003 1.- Carl Ford. "The United States believes that Cuba has at least a limited developmental offensive biological warfare research and developmental effort. En varias partes del texto. Pages 1 to 45*. 2.- Senator Dodd. "That didn’t raise any concerns in your mind that this may have been a speech given in response to the upcoming visit of the former President to Cuba?" Page 35. 3.- Senator Dodd. "I happen to believe the most people admire immensely what President Carter did by going down to Cuba..." Page 44. 4.- Senator Dodd. "President Carter I think did a wonderful, wonderful job, and all Americans, whether you agree with everything he said or every comment made, I think he’s opened up some new opportunities for us here regarding change in Cuba that weren’t present otherwise." Page 45. 5.- Dr. Aubin Heyndrickx. "There is no doubt any more that the Cubans were using nerve gases against troops of Mr. Jonas Savimbi." Page 40 6.- Carl Ford. "I think the rest of the community now feels as strongly as we do that the evidence will support that there is a BW, limited BW offensive development program - an effort, but not a program." Page 9 7.- Carl Ford. "Clearly we are suggesting that Cuba is working on biological weapons" Page 32. 8.- Carl Ford. "I would say that there is substantial information about Cuba’s BW program" Page 33. 9.- José de la Fuente. "There is no one who... believes that Iran is interested in these technologies for the purpose of protecting all the children in the Middle East..." Lo creerá Fidel Castro, Jimmy Carter, o Christopher Dodd? Page 29 10.- José de la Fuente discussed this with the author (Martin in Werlau 2001) in a telephone conversation of October 9, 2001, but said "he does no believe Cuba has malicious intent." Page 29 11.- Senator Dodd. "But my point is he directed the bio-technology program in Cuba, oversaw 350 scientists. He’s asked whether or not there’s any information that there was malicious intent behind the export of dual technology to Iran and he said none." Page 35. 12.- Carl Ford. "Senator, I share your concern. We are watching closely. At this point I don’t know of any evidence that suggests that there has actually been a specific case of retaliation or punishment or any impact." Page 42-43. Las credenciales específicas del columnista Carlos Wotzkow están descritas para información del lector en: http://www.amigospais-guaracabuya.org/g_wotzkow.html
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