El "Chévere": nuevo diario letrinoamericano* ya se oferta en Suiza
"Pero ¿quién no ve, si es honrado y tiene Primero dudé, pero finalmente me decidí a comprarlo. No siempre ocurre que algo tan malo sea comprado y posteriormente, regalado. Además, dudo que haya algún ser humano sobre la tierra que, sabiendo como piensa este manso servidor, quiera arriesgarse a regalarme semejante bofetada camuflada en papel y letras. Si fuera un amigo dejaría de serlo, pero si fuese un enemigo, de seguro que lo hubiera lamentado una buena parte de ese día. Ya dije el mes pasado lo que daba aquella roja "Página de Zürich"1, pues ahora hace falta decir lo que da este guevarista "Chévere de Kreuzlingen" Pero antes de pasar al grano, hablemos de la esencia, pues no sería justo ignorar aquello a lo que este diario concede toda su atención. En la página 3 "Chévere" cedió la palabra a la rabiosa Pastora Dalmacia Von Doberman (no sólo un seudónimo ridículo, sino también cobarde por omisión) que preguntaba: ¿dónde caga mi perro? Pero para dar a los lectores la impresión de que en Suiza ella era una víctima y que aquí, hasta cagar era para los perros de los extranjeros un problema. Sin embargo yo, que también soy extranjero (no perro), que vine a Suiza para salvar el pellejo, y que antes de limpiar el culo a Suiza me preocuparía a limpiar el de Cuba (que bien cagado está), tengo una respuesta para esta burguesa de San Bernardino. Que vacíe los intestinos en su bóveda craneal, que ya bastante porquería tiene dentro. O mejor aun, que defeque sobre una copia del periódico que utilizó para expresar tanta cretinada. Si no le alcanza que me lo diga, que con muchísimo placer le enviaré el ejemplar que ahora critico para que cumpla ese importante propósito. La redacción, a la que le falta un nombre que la represente en su editorial, dice que la tranquilidad europea es una vergüenza a la que la emigración convierte en una insoportable culpa. Se refiere a la triste y bella carta de Yaguine y Fodé y ya por eso ¡bravo! Pero culpable se sentirá también el que no ofrece la cara y luego afirma: "la dirección no se hace responsable de las opiniones omitidas por nuestros colaboradores, estas son responsabilidad de los autores." ¿Qué quiere decir esto? ¿Por qué la propaganda comunista nacida en el capitalismo tira piedras para esconder después la mano? ¿No tendrán miedo a perder la comida servida y la cama tendida? ¿No será este redactor anónimo un machista disfrazado de socialista solidario? ¿Quién le sirve su comida, quién le tiende su mullida cama? Si la demagogia pudiera llevar otro nombre yo le pondría "Chévere". Jhonson Bastidas, cuyo nombre me parece mal escrito y muy poco latinoamericano, felicita en este diario (página 11) a los castristas de Van Van. O sea, felicita directamente el aniversario del fracaso de la zafra de los 10 millones de toneladas métricas de azúcar y con ello, felicita también la aventura musical de un grupo que nació para animar a los cubanos que se empobrecían cada día más. Aquella zafra, para los que no lo saben, desvió todos los recursos humanos y materiales del país con el único propósito de satisfacer la megalomanía del tirano Castro y desde entonces, en Cuba existe un grupo que no ha parado de viajar. Son, que dudas quedan, los promotores del comunismo con el songo2 ... pero sin el songorocosongo. En "Chévere" hay un chévere que utiliza sus páginas para anunciar que la comunidad cubana que vive en Suiza es de las más pequeñas, pero de las más activas, y miren que mal lo hace y por partida doble. En la página 28 repiten lo que parcialmente ya habían publicado en la 13. ¿Somos tan importantes o no tienen nada que escribir para llenar espacios? Y para colmo se aventuran a mentir diciendo que nos agrupamos en torno a las actividades culturales y con el apoyo de asociaciones suizas admiradoras de Fidel y el Ché Guevara. Pero bueno, o Fidel facilita los alucinógenos para que algún tarado chévere escriba semejante nota, o se compra él solito el porro. Hace 5 años, tuve la satisfacción personal de decirle por teléfono a Raymond Müller (presidente de la Asociación Cuba-Suiza) todo lo que me vino en gana. Este minero suizo, que trabajó en Moa durante 17 años, apenas tiene el apoyo de unos pocos comunistas no cubanos repartidos entre los desquiciados del partido obrero popular y unos cuantos anarquistas de la década de los 70. Sin embargo, y aunque se sabe que adoran a Fidel, cuando les propones irse a vivir a Cuba te responden: "nananina papalote". Así las cosas, alerto sobre la contradicción en la que resbala y cae este periódico cuando habla de nosotros. Si a los cubanos en Suiza sólo les interesara bailar, miente entonces cuando publica que más del 50 % se benefician del estatus de refugiados políticos. ¿Dará Suiza asilo político a quien en las audiciones federales habla bien de Fidel Castro? ¿Estará el Chévere incitando a los cubanos comunistas (¿queda alguno?) a abandonar su paraíso castrista para venir a un país donde "ni siquiera dejan que un perrito haga caca"?3 ¿Cómo es posible que estos letrinoamericanos del Chévere confundan al chorizo con la frutabomba? El último día que el Sr. Carlos Lage estuvo en Suiza, una pancarta gigantesca le bloqueó la entrada en su embajada. El cartel rezaba: "Castro ¡Asesino! La historia y tus muertos te condenan ¡Fin a tu inmunidad! Abajo el asno con barba. Y lo firmaban: Pilotos Cubanos en CH." ¿Sería esa acción, de la cual tengo varias fotos, una acción cultural a favor de la revolución cubana? Más aun. En el mes de mayo de este año, el periódico "Der Bund" lanzó una campaña publicitaria en la que utilizaban la carota de Fidel Castro junto a la del Papa. Con ello, pretendían anunciar una serie de artículos que a partir de entonces se publicarían. Pero ocurrió que ni lentos ni perezosos, la pequeña comunidad de cubanos del cantón de Berna se movilizó, y de la noche a la mañana dibujaron en todas las pancartas (entre Biel, Solothurn, Bern y Orpund más de 200) una svástica nazi sobre el rostro de Fidel. ¿Sería esta acción una muestra de cariño con la asociación de Müller y hacia su querido Líder? Una tras otra, tal parece que las acciones y las protestas de los cubanos en Suiza no pueden ser publicadas por aquella gentuza que aún sigue viendo a Fidel Castro como un símbolo antiimperialista. El "Faro de América" que pretendían ver en la revolución de Castro estos ladinoamericanos** se quedó hace ya mucho tiempo sin electricidad. La Cuba roja no ilumina a nadie y su política, no sirve para nada. Por otra parte, ni siquiera los vulgares chulos y jineteros recién llegados de la isla quisieran regresar a ella. Las pocas suizas comunistas que de allá los han sacado hoy se lamentan por haberlo hecho. El hambre es mala consejera y el cubano, por muy torpe o bailador que sea, nunca a sido comemierda. Cierto es que en Zürich se concentra una buena parte de los cubanos que salieron de la isla para fornicar, cierto que por Ginebra pululan algunos agentes de Castro entrenados para extorsionar. Pero la mayoría, con o sin el estatus de refugiados huyeron de Cuba por el malestar. El malestar que genera un régimen discriminatorio y totalitario. El malestar de tener que vivir en su país sin tener ningún derecho. El malestar de saber que todo lo que queda en la Cuba de Castro es represión, tortura e impunidad para el cubano. A ese malestar se une entonces, el de saber que en Europa haya todavía quien le haga el juego y la propaganda a la dictadura más larga de la América. Da pena saber que en Suiza hay un periódico llamado Chévere que inventa tanta mierda sobre los cubanos y luego, que los controle y los ubique para que los agentes del castrismo sepan donde están. Me pregunto si el Chévere, o sus colaboradores, trabajan al servicio de La Habana. ¿Cómo no puede un chileno, un argentino, un boliviano, o quienquiera que haya escrito eso, reconocer que el asilo otorgado a un cubano no lo salva del terror? ¿Ignoran que la seguridad de Cuba anda siempre llamando por teléfono para dejar claro que conocen ya su dirección? Pues si no lo saben... ¡sépanlo! Luego, en Chévere me llevé también una sorpresa. Leí en sus páginas un artículo de la colombiana Helena Araújo y confieso que me sorprendió. Pero no por su buena prosa que ya conocía de la revista Encuentro4, sino por la pésima elección de publicar su artículo en un periódico tan machista como Chévere. Ella, que se declaró feminista en una carta a la redacción de la revista cultural cubana, aparecía como colaboradora entre artículos saturados de frases como estas: "el hombre más dulce de los Van Van", "enloquece a las niñas con su movimiento de cintura y su pregón". ¿Qué hacía la señora Araújo entre tanto macho sabrosón? No lo sé, pero lo que sí puedo asegurar es que para todo aquello que publique en Chévere ha perdido un buen lector. Ni a Cervantes, si para leerlo tengo que buscarlo en semejante desastre editorial. No quiero acabar este artículo sin denunciar entonces una infamia. Chévere, que a lo alto y ancho de sus páginas ya nos ha demostrado su pésima cultura, ha terminado publicando un apócrifo que, por ser tan similar al que lo inspiró, llega a ser un plagio. En la página 21 insertaron un texto "anónimo" que al parecer gusto mucho a un abúlico boludo. Sin embargo, el texto original pertenece al intelecto del cubano Luis Aguilar León y Chévere, más chévere que responsable, sin consulta se lo confiscó5. Si por azar este periódico no fuese tan panfletero, si por la gracia divina sus editores no fuesen tan analfabetos, si el cliché y el chovinismo ladinoamericano no desbordaran ya la letrina de esa latinoamérica perdida, a nadie se le hubiese pasado por alto que Aguilar León, conocido escritor cubano, era el autor del texto intitulado "He aquí que el Profeta habla de los cubanos"6. El Chévere lo firmó como un "anónimo", pero yo lo rectifico: "ladrónimo", ¡tenía que ser! FIN Carlos Wotzkow Bienne Noviembre 1999. *Letrinoamericano: del cubano-castellano, se dice de aquellos aborígenes sudamericanos comunistas, socialistas y progresistas que, ocupados con sus tareas de partido, olvidan que en nuestro continente se habla también el quechua, el mapuche, el aymara, el tarahumara, el nahua, el huichole, el mixteco, el zapoteco, el lacandón, el otomí, el totonaca, el maya etc. ** Ladinoamericano: político blanqueado, o indígena centro o sudamericano, que confunde el comunismo con la solidaridad y al latín con sus raíces lingüísticas y su mejor cultura. 1.- Wotzkow, C. (1999): La página (en castellano) de Zürich: un papel suave y muchos textos aptos para el inodoro. En Guaracabuya. Revista Oficial de la Sociedad Amigos del País, USA 2.- Bastidas, J. (1999): ¡Feliz cumpleaños Van Van! Chévere. Entrevistas. Septiembre /Octubre 1999 p. 11. 3.- Seudónimo (1999): ¿Dónde caga mi perro? Chévere. Opinión del Lector. Septiembre/Octubre 1999 p. 3. 4.- Araújo, H. (1999): ¿Scientia sexualis o ars erotica?. Encuentro de la Cultura Cubana. N° 14, Otoño de 1999 pp: 109-118 & Cartas a Encuentro. P. 241. 5.- Anónimo (1999): Che, ¡paren el carro con los argentinos! Tierra Natal. Chévere. Humor. Septiembre /Octubre 1999 p. 21.
6.- Aguilar León, L. (diferentes ediciones): He aquí que el Profeta habla de
los cubanos. Publicado originalmente en el Diario Las Américas (Miami). Sin
embargo, "Freedom House" (1319 18 st., N.W. Washigton, DC, 20036, USA) lo
acaba de publicar otra vez junto a otros ensayos del autor.
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