EL BAMBINO FUE SUPERIOR A BONDS Y AARON

por Angel Torres


Comenzaremos por el desplazado Hank Aaron, que hasta el pasado martes 7 de agosto de 2007, era el líder jonronero de todos los tiempos con 755, cuando fue dejado en el olvido por el nuevo rey, Barry Bonds, en el At & T Park de San Francisco, quien le pegó el número 756 al serpentinero Mike Bacsik de los Nacionales de Washington. Sin dudas que Bonds (no mezclemos a los esteroides en todo el asunto), fue al bate 2,590 veces al bate menos que Aaron. Bonds acudió 9,774 oportunidades contra 12,364 de Aaron.

El caso de Ruth fue más notable, porque sus 8,399 viajes al plato fueron 3,965 menos que los acumulados por Aaron, lo que significa haber jugador por lo menos en siete temporadas menos.

Durante muchos años los fanáticos se preguntaron, cuantos cuadrangulares se hubiera anotado el Babe, de haber llegado a los 12,364 de Aaron. La respuesta la ofreció el “World Features Syndicate”, que realizó una fantástica estadística en 1993, para dar a conocer cuantos peloteros hubieran superado los 755 bambinazos conectados por Aaron, de haber consumido 12,364 turnos como él lo hizo. He aquí el sorprendente resultado:

1- Babe Ruth (1,051).

2- Ralph Kiner (876).

3- Ted Williams (836).

4- Mickey Mantle (818).

5- Jimmie Foxx (812).

6- Mike Schmidt (811).

Todos ellos hubieran integrado el Club de los 800, con un posible futuro inquilino en la figura de Alex Rodríguez si se mantiene sano durante los próximos ocho o nueve años y no le sucede lo que a Ken Griffey (Jr), que lucía en camino de romper la marca, hasta que comenzaron las lesiones.

Para aquellos que no lo saben, deseo informarles que Babe Ruth apareció en 262 encuentros y 834 menos veces al bate que Barry Bonds, lo que en realidad se convierte en 923 si le sumamos a Bonds los 89 elevados de sacrificio que no se cuentan como viajes al plato. Igualmente el Bambino perdió entre 50 y 60 vuelacercas, por motivo que el poste en la cerca para decidir si una bola era buena o mala, no se usó hasta 1929. También perdió muchos jonrones que decidieron encuentros con hombres sobre las bases, que se convirtieron en hits o dobles, porque solamente se contaba la carrera que decidiera el partido. El Bambino conectó un cuadrangular cada 11.8 veces al bate a pesar de la bola muerta, contra 12.9 turnos por parte de Bonds con la pelota viva fabricada en Costa Rica, al momento de alcanzar cada uno los 714 jonrones.

El Babe le pegó a la bola a un ritmo de .342 durante su carrera, contra .298 de la estrella de los Gigantes hasta el presente y fue además el mejor lanzador zurdo de su época, imponiendo récords durante la temporada regular y en Clásicos Otoñales. Lo superó en promedio de poder, total de bases, carreras impulsadas y anotadas, conectó más hits, se ponchó menos veces, lideró el circuito en vuelacercas 12-2.a su favor.

El Sultán de la Estaca participó en 10 Series Mundiales por una de Bonds. Todos saben que el Bambino fue una leyenda que salvó al béisbol en su momento más difícil y cambió el estilo de batear de los jugadores. Pegó sus vuelacercas viajando en trenes y autobuses, comiendo hamburguesas, bebiendo cerveza y entrenando de noche en los bares. Bonds viajando en aviones con aire acondicionado, comiendo como un rey, con vitaminas, gimnasios modernos, bola viva, estadios mejor acondicionados, esteroides, hormonas de crecimiento humano y 150 lanzadores extras producto de la ampliación de 16 a 30 equipos en las Ligas Mayores. A la edad que Bonds se desató sospechosamente a pegar bambinazos, ya Ruth era un viejo gordo y barrigón.

Aclararé lo referente a los serpentineros, porque algunos lectores han sugerido que anteriormente los lanzadores eran inferiores a pesar de que en la pelota moderna deambulan más de 150 que en realidad pertenecen a las Ligas Menores. Analizaremos una a una las exposiciones de esos fanáticos:

1- EN SU EPOCA NO JUGABAN LOS PELOTEROS NEGROS Y LATINOS:- Eso es una gran verdad, pero entonces la bola estaba más muerta que el mar que lleva su nombre y él era superior a todos los demás jugadores de su época disparando películas de cuatro esquinas, al extremo que en 1918 siendo lanzador conquistó con 11 el liderato de los jonroneros, empatado con el jardinero Tilly Walker de los Atléticos de Filadelfia, que jugaba todos los días. En 1920 cuando ya era un jugador regular, sus 54 cuadrangulares constituyeron una cantidad superior a lo logrado por cualquier equipo de Grandes Ligas. Por ejemplo los Indios de Cleveland que conquistaron el campeonato ese año en la Liga Americana y que después le ganaron la Serie Mundial a los Dodgers de Brooklyn en siete encuentros, entre todos los peloteros juntos de la novena, se anotaron 35 tetrabases contra los 54 de Ruth. La superioridad del Bambino era tan grande que aparentaba ser un ser de otra galaxia.

2- LOS PITCHERS DE ANTES NO TIRABAN TAN DURO: Parece que nunca oyeron hablar de Walter “El Tren” Johnson, Cy “Ciclón” Young, Lefty Grove, Grover Cleveland Alexander y más recientemente Bob “El Meteoro” Feller. Inclusive en la pelota amateur no ha surgido nadie que la tire más duro que Julio “El Jiquí” Moreno.

3- NO EXISTIAN LOS LANZADORES RELEVOS: Ese es el mito más grande que han inventado en el béisbol moderno, donde los managers le fabrican los partidos salvados a sus relevistas estrellas, sin decir que antes se necesitaba lanzar tres episodios para anotarse un salvado. Igualmente ocultan que los relevistas intermedios, lo único que hacen es demorar los juegos y aumentar el carretaje. Antes los serpentineros que no podían terminar un encuentro, eran sustituidos por tipos como Walter Johnson, Cy Young o Christy Mathewson, pues solamente existían ocho lanzadores por novena y los abridores igualmente trabajaban como relevistas, al igual que los novatos o los veteranos como en el caso de Johnny Sain. ¿Se han tomado la molestia en averiguar en cuantos desafíos como taponeros actuaron esas figuras estelares?. Les diré que cuando Carl Hubbell estableció su récord de 24 victorias consecutivas, la última la consiguió en misión de rescate. Firpo Marberry del Washington, fue el pionero de los apagafuegos en 1926, por la sencilla razón que se dedicó a esa labor sin ser abridor. Le siguieron especialistas como Johnny Murphy, que ayudó a ganar cuatro Series Mundiales consecutivas a los Yanquis; el zurdo Joe Page y Jim Konstanty, quien fue el primero a quien se le reconocieron sus méritos en 1950, ganando el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional.

4- NO EXISTIAN LANZAMIENTOS COMO LA SLIDER, SPLIT FINGER FAST BALL Y EL CAMBIO DE VELOCIDAD: Aquí es donde se volaron la cerca algunos desconocedores del béisbol, por no saber que la “slider” es la “fade away” inventada por Christy Mathewson a principio del pasado siglo y que la “split finger fast ball es la bola de “tenedor” que Fred Martin le enseñó a Bruce Sutter, quien fue el primero que la utilizó con el nuevo nombre. Algo así como la guaracha cubana que ahora se llama salsa. Los críticos debían preguntarles a sus padres si vieron lanzar a Cocaína García, un zurdo cubano que convirtió el cambio de velocidad en una obra de arte, tal como sucedió con Lefty Gómez, Elroy Face, Eddie Lopat y Andy Messersmith. Además hasta 1920 se tiraba oficialmente la “bola de saliva”, tan efectiva que aún sigue prohibida en el béisbol. ¿Ustedes sabían que en una temporada los Senadores contaban con cinco nudillistas en su elenco?. Nadie ha logrado aún tirar la curva hacia abajo como Rube Wadell, Tommy Bridges y Camilo Pascual.

Si alguien habla en una película relacionada con figuras tan disímiles como Rambo, Robin Hood o James Bonds, enseguida todos piensan en Sylvester Stallone, Errol Flynn y Sean Connery. Si se trata de monstruos cinematográficos salen a relucir Frankenstein, La Momia y El Hombre Lobo. Cuando se mencionan los estilos de música como el tango, bolero, son montuno y la típica guaracha cubana, se convierten en sinónimos de Carlos Gardel, Olga Guillot, Benny Moré y Celia Cruz. Javier Solís continúa siendo el intérprete por excelencia del bolero ranchero. En el fútbol soccer Pelé siguen siendo el rey. El símbolo de los 40-40 es José Canseco y muchos no recuerdan que Bonds, Alex Rodríguez y Alfonso Soriano igualmente pertenecen a ese club. Aunque anden de capa caída, los Yanquis representan el poderío en el deporte de las bolas y los strikes. Con los jonrones en el béisbol, de inmediato surge el nombre de su creador: el Bambino Babe Ruth, a pesar de que no vive en el mundo de los vivos desde hace 59 años y cada vez que Bonds pega un batazo de vuelta entera, se dice que conectó un bambinazo (en honor al Bambino). Quien piense lo contrario vive en un planeta lejano a la Tierra.

En honor a Bonds y a los que quieren ponerle un asterisco a su récord, puedo decirles que si se lo pusieron a Roger Maris por participar en una campaña de ocho encuentros más que los jugados por Ruth, entonces debían haberle puesto uno a Aaron por sus 3,965 más veces al bate que el Babe y a Bonds por sus 923 (incluyendo los flies de sacrificio) por sobre el Bambino. A Bonds uno adicional por lograr su proeza durante el reinado de los esteroides, pero entonces para ser justo, tendrían que usarlos contra todos los que han impuesto marcas en las últimas dos décadas, cuando los jonrones viajaban a más de 450 pies del plato y no como los de ahora que caen a 60 o 70 pies menos, con contadas excepciones.



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